La opción preferencial por los pobres es un llamamiento fundante de la Vicaría

Desde nuestra concepción cristiana entendemos que los pobres son iguales en dignidad y derechos y su situación de pobreza nace precisamente de la falta de una vivencia cristiana en la sociedad, la que privilegia el individualismo, la competencia y la injusticia por sobre los valores cristianos. Esta opción ha movilizado a los trabajadores de la Vicaría durante los 31 años de existencia de la institución quienes han buscado dar testimonio de la solidaridad que es fruto del encuentro con Jesús, insistiendo que esa solidaridad no es algo añadido a la vida de fe, sino la consecuencia de esa experiencia de fe.

La opción preferencial por los pobres exige, para una institución como la Vicaría, una alta profesionalización en la forma en que desarrollamos los distintos programas y proyectos y en la forma en que nos relacionamos con nuestros interlocutores. Al hablar de profesionalización nos referimos a una forma eficiente, eficaz y oportuna de realizar nuestro trabajo, además de realizarlo con impecabilidad administrativa. No se trata de complejizar la forma en que hacemos nuestro trabajo ni de darle menor valor a las acciones que realizan como voluntariado tantas otras personas y comunidades. Al contrario, se trata de hacernos consientes dela responsabilidad que tenemos como trabajadores de la iglesia y que en palabras del Papa Francisco, lo dice así: “(la iglesia no es una agencia humanitaria) es algo diferente y mucho más grande: es, en Cristo, el signo e instrumento del amor de Dios por la humanidad y por toda la creación, nuestro hogar común."

Les animo a mantener presente esta opción preferencial por los pobres en todo momento mientras desarrollan su trabajo y que generen espacios colectivos de reflexión en torno a la forma en que estamos viviendo este mandato para encarnarlo cada día mejor y llegando a más personas y comunidades.