Editorial: Día Internacional del Refugiado

No se trata sólo de migrantes” significa que al mostrar interés por ellos, nos interesamos también por nosotros, por todos; que cuidando de ellos, todos crecemos; que escuchándolos, también damos voz a esa parte de nosotros que quizás mantenemos escondida porque hoy no está bien vista”.    Francisco; Mensaje Jornada Mundial del Migrante y del Rrefugiado 2019

A partir del año 2001, cada 20 de junio conmemoramos a nivel internacional a hombres, mujeres, niños y niñas que por diversos motivos, principalmente conflictos armados y persecución, han debido abandonar su país y huir por salvar sus vidas. 

De acuerdo a los informes de Naciones Unidas actualmente enfrentamos los índices más altos de desplazamiento forzoso, se estima que más de 65 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus hogares, de esos 22 millones son refugiados (as) y más de la mitad de ellos son niños y niñas.

El programa de Reasentamiento de Refugiados Sirios que ejecuta la Vicaría en con junto con ACNUR y el Estado, está pronto a cumplir dos años de acompañamiento a 14 familias Sirias. Durante este periodo y enfrentando la barrera lingüística hemos podido conocer algo de la historia de cada uno de ellos, de sus sueños, sus miedos. Con alegría y orgullo vemos cómo algunos caminan libres y tranquilos por las calles, cómo llevan a sus hijos al colegio o al centro de  salud, cómo enfrentan las primeras experiencias de trabajo en Chile. También vemos a otros paralizados, somatizando el dolor, perdidos o dañados. El camino no ha sido fácil sobre todo para ellos.

El Papa en su mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado analiza detalladamente causas e impactos de este fenómeno, y las tendencias individualistas de las sociedades actuales,  invitándonos a analizar los inhumanos efectos de lo que él llama la  “globalización de la indiferencia”  y a su vez nos desafía a poner en el centro de la situaciones de violencia e injusticia  a la “persona humana” a  esa persona que recibe asilo pero que  también entrega. Sin duda Chile al abrir  sus fronteras para recibir a estas familias, también las abre a su cultura e  idiosincrasia,  como dice el Papa “no se trata sólo de migrantes”, comprender la interculturalidad implica  reconocer al otro como diferente pero también como igual.

La invitación es que este 20 de junio sea tiempo de discernimiento de la realidad nacional e internacional, que le pongamos rostro a este día. Todos y todas  tenemos interlocutores migrantes o refugiados, que junto a ellos definamos  las mejores estrategias para  acoger, proteger, promover e integrar.
 

Ana Luisa Muñoz
Encargada del Programa Reasentamiento de Refugiados Sirios
Vicaría de Pastoral Social Caritas